Resultados se suman a trabajo permanente en materias de sustentabilidad, la certificación de la europea, Ecoports, fue la última que adquirió la empresa estatal.
Las toneladas transferidas durante los dos primeros meses de este año, mantiene la tendencia, respecto a igual periodo de 2019, así como el número de naves atracadas que, durante enero y febrero de 2020, alcanzaron las 40, son solo algunas de las cifras, que dan un balance positivo, a la fecha, del desempeño y capacidad de Puerto Antofagasta.
“Uno de nuestros lineamientos estratégicos dice y tiene relación también con una producción limpia, moderna, innovadora y, por supuesto, siempre de la mano con la comunidad, por lo que nuestros desafíos son constantes, trabajamos día a día por mejorar y ser cada vez más eficientes con todo lo antes expuesto”, puntualizó Carlos Escobar, gerente general de EPA
En este sentido, es importante mencionar que otros de los elementos que contribuyen a un buen desempeño vienen de la mano de las tecnologías adquiridas, especialmente tras el Acuerdo de Producción Limpia Logístico Minero Puerto Antofagasta, iniciativa, público- privada, de carácter voluntario que, en total, implicó una inversión de más de 18 millones de dólares y que, en el caso de EPA y ATI, comprendió la adquisición e implementación de contenedores herméticos de volteo, spreaders y la modernización del Antepuerto Portezuelo.
“Tal como hemos mencionado, en ocasiones anteriores, estos resultados no serían posible sin el trabajo mancomunado y a la capacidad logística de nuestro concesionario Antofagasta Terminal Internacional, a los operadores del Terminal Multioperado y, por supuesto, al compromiso de todo el equipo humano que conforma la familia portuaria y a la confianza de nuestros clientes”, agregó Escobar.
Capacidad y producción que la empresa pretende mejorar e incrementar, en el mediano plazo, con proyectos como la Zona de Desarrollo Logístico Puerto Antofagasta, una iniciativa que permitirá, entre otros beneficios, aumentar la oferta logística portuaria de manera sustentable, garantizando el comercio exterior por Antofagasta y así fortalecer el crecimiento económico en conjunto con la calidad de vida de la comunidad. Se trata de un área estratégica de 50 hectáreas, ubicada a 32 kilómetros de la ciudad, cercana a los principales centros mineros y equidistante con otros puertos de la región. La licitación y adjudicación de esta obra se espera para este año.